Asociación Mitre se presenta por primera vez en su estadio en el Campeonato Argentino de Clubes del NOA. Será a las 22, frente a 20 de Febrero (Salta), otro ganador del grupo en la fecha inaugural.

El “verde” apostó por el chaqueño Rodolfo Barrios (44) para conducir su plantilla superior. Tiene un arreglo verbal con el club, algo infrecuente en estos tiempos:

“No tengo contrato, en la medida que los dirigentes estén cómodos conmigo y que yo esté cómodo, se va a seguir”, explica el entrenador al que los de la plazoleta trajeron con el objetivo de ascender al Torneo Federal.

Afirma que ha llegado a una institución que está en un proceso de crecimiento y acerca del estilo que pretende para el equipo, apunta: “nosotros estamos planteando hoy un juego de mucha transición.

A mí me gusta y, por ejemplo, creo que tanto Juan Pablo, José, cuando vuelva Enrique (Muruaga) y el mismo Sergio (Ale), más allá de la edad que tiene, son jugadores con características para desarrollar ese estilo.

Y ahora que (Carlos) Barros le agregó bastante calidad, podemos desplegar un juego muy dinámico, con mucha transición, no con ofensivas estáticas. Y defender mucho hombre a hombre”.

Respecto del torneo local, Barrios se muestra sorprendido por el nivel de violencia que observa. “Hay mucho maltrato hacia los árbitros, para mí injustificadamente, sin necesidad. Y esa violencia se refleja en la Primera y en las formativas.

Hay jugadores que golpean en forma desleal y ponen en riesgo la integridad física de sus colegas. En las inferiores se observa una gran presión de los padres. Hay que cambiar. Todos (técnicos, jugadores, dirigentes, espectadores) debemos respetar al árbitro”.

No hay plazos para su trabajo, pero quiere dejar su huella. Participa activamente en distintos aspectos de la vida del club, especialmente en la estructura de organización. Mientras tanto, Mitre se ilusiona con acompañar la próxima temporada a Independiente y a Talleres en el Torneo Federal.

El club sigue mejorando sus instalaciones:

Cuando Barrios se refiere a esta nueva etapa de Mitre, señala que el proceso evolutivo requiere de paciencia y perseverancia.

“Según me cuentan, el club ha pasado por momentos complicados y está claro que no se les puede exigir a los dirigentes que de la noche a la mañana nos transformemos en Barcelona.

Hay que ir despacio; así como yo no quiero que a los entrenadores se los presione, me gusta que vayamos convencidos en la dirección que tomamos”.

“Hay que mejorar la infraestructura, los implementos, los lugares de trabajo, la logística del equipo. Hablo con el presidente (José Muruaga padre) y él quiere eso. Hay que darle un tiempo”, agrega.

La actual gestión priorizó la infraestructura e hizo una significativa inversión en arreglar el techo del “Dionisio Muruaga”, vestuarios nuevos y el parquet, entre otras mejoras. El piso flotante fue dejado a nuevo con una erogación de casi $ 75.000.

“Es lógico que se haya empezado por ahí; insisto en que hay que darle su tiempo a la dirigencia para que el club crezca. Hay que tener paciencia y trazar un camino, para luego recorrerlo con seriedad y organización”, insiste.

Fuente: LA GACETA