En el primer partido dominado ampliamente por uno de los equipos en toda la serie, Atenas sacó a relucir su mejor juego de equipo y defensa y venció 91-83, quedándose con la serie 4-2 y con el título.
Andre Laws, MVP de las finales.

Si algo había caracterizado a la serie final entre Atenas y Peñarol en los primeros cinco juegos era la paridad. Pero en el arranque del sexto partido, la historia comenzó totalmente distinta.

Atenas presionó defensivamente de entrada, provocó muchas pérdidas en el local y se puso 12-0 en cuatro minutos. Peñarol recién anotó su primer punto a los 4m10s, a través de un libre de Román González, pero tuvo que esperar un buen rato hasta ponerse medianamente en juego.

Tras una máxima en contra de 4-19, Peñarol levantó la puntería, clavó un parcial de 9-0 y terminó el cuarto con un regalo: 22-26. Peñarol respiraba, sobre todo porque en el inicio del segundo cuarto siguió dominando y se colocó a apenas un doble (26-28).

El esfuerzo realizado le jugó una mala pasada, porque se quedó sin piernas y sin recursos y Atenas aprovechó ese pequeño relajamiento para volver a sacar una diferencia importante: 35-46 al finalizar el segundo cuarto.

Laws penetraba con facilidad, Locatelli se mostraba muy efectivo en los lanzamientos, Ferrini y Romero traían respuestas desde el banco y Peñarol parecía demasiado presionado por los nervios como para lograr un juego aceitado.

Ahí estaba la mayor diferencia. Mientras que los cordobeses movían la pelota sin encontrar demasiada oposición, Peñarol no le podía poner el balón cerca del cesto a González, no tenía opciones a través de Jackson (sólo buscando el uno contra uno), y se quedaba demasiado estático ante la enorme defensa de Atenas.

El tercer período fue clave. Atenas, con una gran actitud, peleó cada pelota, aprovechó el bajón anímico que se vislumbraba claramente en el local y, con un buen momento de Lábaque y de Ferrini, llegó a sacar una máxima de 20 (50-70). El cuarto terminó 53-71 y parecía que poco había para dar vuelta la historia.

Sin embargo, Peñarol tiró todo lo que le quedaba de orgullo a la cancha. A pesar de perder a Jackson por lesión, con los pibes, mucho corazón, y algunas bombas clave, se puso 2 veces a 9 puntos. Una falta cobrada a Diez sobre Kante (pareció ataque), fue clave para que Atenas lograra sortear el mal momento, pero igual no podía quebrarlo.

Parecía que lo hacía cuando se puso 71-86, pero 2 triples consecutivos de Muruaga y Rodríguez, otra vez bajaron la distancia a 9. La reacción continuó hasta bajar la diferencia a 5 (83-88), pero un triple de Laws cerró toda chance para el local.

Para la visita fue solamente una cuestión de no entrar en la locura que marcaba su rival. Controló el tiempo, dejó pasar los segundos y lo ganó, sufriendo, pero lo ganó. Atenas es el nuevo campeón de la Liga, tras cinco años de sequía, y lo consiguió con justicia. Andre Laws, que anotó 21 puntos en este partido y fue clave en el quinto, fue elegido como el MVP de la serie.

Peñarol 83-Atenas 91 (serie 2-4)

Peñarol (83): Sebastián Rodríguez 20, David Jackson 11, Fernando Malara 13, Byron Johnson 4 y Román González 9 (FI); Alejandro Diez 10, José Muruaga 6, Sebastián Vega 2, Facundo Campazzo 0, Lucas Picarelli 6 y Alejandro Reinick 2. Entrenador: Sergio Hernández.
Atenas (91): Juan Pablo Figueroa 3, Andre Laws 21, Juan Manuel Locatelli 13, Leonardo Gutiérrez 13 y Djibril Kanté 8 (FI); Bruno Lábaque 14, Diego Osella 0, Federico Ferrini 12 y Cristian Romero 7. Entrenador: Rubén Magnano
Parciales: 22-26, 35-46, 53-71 y 83-91
Arbitros: Fernando Sampietro, Alejandro Ramallo y Fabricio Vito
Estadio: Polideportivo Islas Malvinas.

Fuente: Basquet Plus